martes, 26 de agosto de 2014

Unas notas y tres libros

Como decía Darth Vader en La guerra de las galaxias: “Tu falta de fe resulta molesta”, pero cuando a lo anterior (aplicado al hecho de convencer a los descerebrados) se suma la constatación de que cada vez es más numerosa la primera tribu es decir la de los gilipollas (dicho de Sherman Alexie en El diario completamente verídico de un indio a tiempo parcial: “El mundo se divide en dos únicas tribus, la gente que es gilipollas y la gente que no lo es”), lo mejor es refugiarse en por ejemplo unos buenos libros para no deprimirse. Como dice el dicho friki: “Errar es humano, pero para cagarla de verdad necesitas la contraseña raíz”. Pues es asombroso la cantidad de gente que sabe la contraseña raíz. Debe de ser que nacen con ella en los genes.
Tres libros: uno entretenido de Noah Gordon “El comité de la muerte” (rocabolsillo), aunque después de leer del mismo autor tres estupendos libros “El médico”, “Chamán” y “La Doctora Cole” con un fondo también sobre temas médicos, la temática ya cansa un poco. De todas formas es un gran novelista.
Otro, es un librito de Sokyo Ono tiulado “Sintoísmo: la vida de los kami” de la editorial Satori. Estupendo el contenido y el continente. Sencillo y claro en el resumen de dos milenios de creencias religiosa en Japón.
El tercero es del Catedrático de Literatura Española de la Universidad de Alcalá de Henares Juan Juaristi: “Miguel de Unamuno”. Pertenece a la colección de españoles eminentes de la editorial Taurus. Estupendo libro para una lectura pausada y tranquila sobre un personaje clave y contradictorio en la España del fin del siglo XIX. Es acertada la definición de Unamuno como el primer intelectual moderno del país de entonces.

sábado, 2 de agosto de 2014

Que poco nos acordamos de ellos y cuanto han dado

Que costoso es asumir la degradación de los cuerpos y las mentes que se ve en las residencias donde están ingresadas las personas mayores. Dentelladas de la vida en el cuerpo que deteriora la mente y dentelladas de la vida en la mente que encoge el cuerpo. Es difícil mantener su mirada fija y profunda; uno no sabe si piden ayuda, si se disculpan por lo que muestran ó consideran nuestra cabeza como punto de referencia del infinito. Algunas/os tiene la “suerte” (desgracia para las personas que les quieren) de haberse ido en vida hacia los recuerdos que les quedan, hasta que también éstos recuerdos desaparecen.
La ciencia nos ha hecho ver lo que somos y lo que nos espera, queramos ó no. Somos un "saco" de células que ha evolucionado un poco más que otros "sacos" de células. La ciencia nos ha permitido saber la forma de vivir más años y mitigar los “dolores” del cuerpo y la mente en los momentos finales. Allá con el que quiera sufrir, pero que nadie intente imponer por la fuerza el sufrimiento a los demás. No me vale ningún razonamiento, ninguno, ni argumentar como recurso cualquier tipo de juramento.
Probablemente la salud sea más importante que la educación sino fuera porque la educación está ligada a evolución de la medicina. Vale más morir dignamente aunque uno sea un poco más ignorante. Que alegría cuando uno ve que están bien atendidos los abuela/os gracias a los medios destinados a su cuidado y que miserables (me quedo corto) son los que escatiman dichos medios con cualquier disculpa.